How Intermittent Fasting Affects Hormones: Insulin, Growth Hormone, and More

Cómo afecta el ayuno intermitente a las hormonas: insulina, hormona del crecimiento y más

El ayuno intermitente tiene un profundo impacto en el equilibrio hormonal del cuerpo, influyendo en una variedad de hormonas que desempeñan papeles críticos en el metabolismo, el crecimiento y la salud en general. Hormonas como la insulina y la hormona del crecimiento humano (HGH) se ven significativamente afectadas por los períodos de ayuno, lo que genera numerosos beneficios para la salud, incluido un mejor control del azúcar en sangre, mayor quema de grasa y conservación de la masa muscular. En esta publicación, exploraremos cómo el ayuno intermitente influye en las hormonas clave del cuerpo y por qué estos cambios pueden ser beneficiosos.

1. Reducción de los niveles de insulina y mejora de la sensibilidad a la insulina

La insulina es una hormona que regula los niveles de azúcar en sangre al facilitar la absorción de glucosa en las células. Cuando los niveles de insulina son constantemente altos, el cuerpo puede volverse menos sensible a la insulina, lo que conduce a la resistencia a la insulina, un precursor de la diabetes tipo 2.

El ayuno intermitente ayuda a reducir los niveles de insulina al reducir la frecuencia y la duración de los niveles elevados de azúcar en sangre. Durante los períodos de ayuno, los niveles de insulina disminuyen, lo que permite que el cuerpo cambie la glucosa por la grasa como fuente principal de energía. Las investigaciones indican que el ayuno intermitente puede reducir los niveles de insulina entre un 20 y un 31 % y mejorar la sensibilidad a la insulina, lo que ayuda a reducir el riesgo de desarrollar resistencia a la insulina y diabetes tipo 2.

Al reducir la exposición del cuerpo a niveles elevados de insulina, el ayuno intermitente no solo mejora la quema de grasa sino que también mejora la flexibilidad metabólica, permitiendo que el cuerpo alterne de manera más eficiente entre la quema de glucosa y grasa para obtener energía.

2. Aumento de los niveles de la hormona del crecimiento humano (HGH)

La hormona del crecimiento humano (HGH) es esencial para el crecimiento, la reparación celular y el metabolismo. La HGH ayuda a mantener, desarrollar y reparar el tejido sano en el cerebro y otros órganos. Desempeña un papel vital en el crecimiento muscular, el metabolismo de las grasas y el rendimiento físico general.

Se ha demostrado que el ayuno intermitente aumenta significativamente los niveles de HGH. Durante los períodos de ayuno, la secreción de HGH puede aumentar hasta cinco veces. Este aumento de HGH favorece la quema de grasa, preserva la masa muscular magra y mejora la recuperación y la reparación muscular. Un estudio publicado en el Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism descubrió que el ayuno puede aumentar los niveles de HGH, lo que promueve el mantenimiento muscular y al mismo tiempo estimula la pérdida de grasa.

3. Equilibrio entre la grelina y la leptina: hormonas del hambre y la saciedad

La grelina, a menudo denominada “hormona del hambre”, estimula el apetito, mientras que la leptina, conocida como “hormona de la saciedad”, ayuda a regular el equilibrio energético inhibiendo el hambre. Se ha demostrado que el ayuno intermitente influye en los niveles de ambas hormonas, lo que conduce a un mejor control del apetito y a una reducción de los antojos.

Las investigaciones sugieren que el ayuno intermitente puede reducir los niveles de grelina, lo que disminuye el hambre y el apetito con el tiempo. Al mismo tiempo, el ayuno puede mejorar la sensibilidad a la leptina, lo que permite que el cuerpo reconozca mejor las señales de saciedad. Una mayor sensibilidad a la leptina puede ayudar a prevenir la sobrealimentación y favorecer una pérdida de peso sostenida.

4. Aumento de la adiponectina: la hormona quemagrasas

La adiponectina es una hormona liberada por las células grasas que ayuda a regular los niveles de glucosa y la descomposición de los ácidos grasos. Los niveles más altos de adiponectina se asocian con una menor inflamación, un aumento de la quema de grasa y una mejor sensibilidad a la insulina. Se ha demostrado que el ayuno intermitente aumenta los niveles de adiponectina, lo que mejora la capacidad del cuerpo para quemar grasa para obtener energía y mantener niveles saludables de azúcar en sangre.

Un estudio publicado en Metabolism: Clinical and Experimental descubrió que el ayuno intermitente conducía a niveles más altos de adiponectina, que se asociaban con mejores marcadores de salud metabólica, incluidos niveles más bajos de triglicéridos y niveles mejorados de colesterol. Esto hace que el ayuno intermitente sea una estrategia valiosa para quienes buscan mejorar la salud metabólica mientras pierden grasa.

5. Regulación del cortisol: la hormona del estrés

El cortisol, a menudo denominado "hormona del estrés", es liberado por las glándulas suprarrenales en respuesta al estrés y a la baja concentración de glucosa en sangre. Si bien el cortisol es necesario para el funcionamiento normal del organismo, los niveles crónicamente elevados pueden provocar efectos negativos para la salud, como aumento de la grasa abdominal, hipertensión y deterioro muscular.

El ayuno intermitente puede ayudar a regular los niveles de cortisol, aunque los efectos pueden variar según la persona y el tipo de régimen de ayuno. Algunos estudios sugieren que el ayuno puede reducir los niveles de cortisol al promover la flexibilidad metabólica y reducir la frecuencia de los picos de cortisol inducidos por la alimentación. Sin embargo, el ayuno prolongado o severo puede aumentar el cortisol debido a la respuesta del cuerpo al estrés ante la inanición percibida.

Conclusión

El ayuno intermitente tiene efectos significativos en varias hormonas que son cruciales para el metabolismo, la regulación del apetito, el crecimiento y la salud en general. Al reducir los niveles de insulina, aumentar la hormona del crecimiento humano (HGH), equilibrar la grelina y la leptina, mejorar la adiponectina y regular el cortisol, el ayuno intermitente ayuda a crear un entorno hormonal que favorece la pérdida de grasa, la retención muscular y la salud metabólica. Ya sea que esté buscando mejorar el control del azúcar en sangre, mejorar el rendimiento físico o controlar su peso de manera más efectiva, comprender cómo el ayuno intermitente influye en sus hormonas es clave para maximizar sus beneficios.

Fuentes:

  1. Mattson, MP, Longo, VD y Harvie, M. (2017). Impacto del ayuno intermitente en los procesos de salud y enfermedad. Aging Research Reviews, 39 , 46-58.
  2. Ho, KY, Veldhuis, JD, Johnson, ML, Furlanetto, R., Evans, WS, Alberti, KG y Thorner, MO (1988). El ayuno mejora la secreción de la hormona del crecimiento y amplifica el complejo ritmo de secreción de la hormona del crecimiento en el hombre. Journal of Clinical Investigation, 81 (4), 968-975.
  3. Antoni, R., Johnston, KL, Collins, AL y Robertson, MD (2017). Efectos del ayuno intermitente en el metabolismo de la glucosa y los lípidos. Actas de la Nutrition Society, 76 (3), 361-368.
  4. Kondo, Y., Shinomura, Y., Kato, K., y Miyazaki, Y. (2016). Impacto de la grelina en el metabolismo y la regulación del apetito. Journal of Endocrinology, 231 (1), R51-R64.
  5. Varady, KA y Hellerstein, MK (2007). Ayuno en días alternos y prevención de enfermedades crónicas: una revisión de ensayos en humanos y animales. American Journal of Clinical Nutrition, 86 (1), 7-13.
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