Cómo afecta el ayuno intermitente a la pérdida de peso: una mirada integral
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En los últimos años, el ayuno intermitente se ha convertido en una estrategia popular para perder peso y mejorar la salud metabólica. En lugar de centrarse en qué alimentos comer, el ayuno intermitente se centra en cuándo se deben comer. Este enfoque aprovecha los procesos metabólicos naturales del cuerpo para mejorar la quema de grasas, mejorar la sensibilidad a la insulina y promover la salud general. Pero, ¿cómo ayuda exactamente el ayuno intermitente a perder peso? Profundicemos en la ciencia que lo sustenta.
1. Restricción calórica sin contar calorías
Una de las principales formas en que el ayuno intermitente promueve la pérdida de peso es a través de la restricción calórica natural. Al limitar la ventana de alimentación a una cantidad específica de horas (como en el método 16:8) o reducir la ingesta en ciertos días (como en la dieta 5:2), las personas tienden a consumir menos calorías en general. Los estudios muestran que el ayuno intermitente puede ayudar a reducir la ingesta calórica diaria en un 20-25%, lo que facilita la creación de un déficit calórico necesario para la pérdida de peso sin la necesidad de un recuento riguroso de calorías.
2. Mayor quema de grasa gracias a niveles más bajos de insulina
El ayuno intermitente desencadena cambios fisiológicos que hacen que el cuerpo queme grasas de forma más eficiente. Cuando ayunas, los niveles de insulina bajan significativamente, lo que facilita la descomposición de las grasas. El Dr. Jason Fung, un destacado experto en ayuno, explica que los niveles más bajos de insulina permiten que la grasa almacenada se libere y se queme más fácilmente para obtener energía. Este proceso se conoce como lipólisis. Con el ayuno intermitente regular, el cuerpo se vuelve más hábil para cambiar de glucosa a grasa como su principal fuente de combustible, lo que conduce a una pérdida de grasa más efectiva.
3. Aumento de la tasa metabólica
Contrariamente a la creencia popular, el ayuno no necesariamente ralentiza el metabolismo. De hecho, se ha demostrado que el ayuno a corto plazo aumenta la tasa metabólica entre un 3,6 y un 14 %, lo que hace que se quemen más calorías a lo largo del día. El cuerpo libera norepinefrina (noradrenalina) para ayudar a movilizar las reservas de grasa y convertirlas en energía, lo que puede mejorar la tasa metabólica. Este aumento del metabolismo puede ayudar a contrarrestar la ingesta calórica reducida y evitar el problema común de la meseta de pérdida de peso.
4. Mejora el equilibrio hormonal para bajar de peso
El ayuno intermitente afecta positivamente a varias hormonas involucradas en la regulación del peso, como la insulina, la grelina y la leptina. Los niveles más bajos de insulina no solo promueven la quema de grasa, sino que también reducen el almacenamiento de grasa. La grelina, la hormona del hambre, tiende a disminuir con el ayuno intermitente constante, lo que reduce los dolores de hambre y ayuda a las personas a cumplir con su programa de ayuno más fácilmente. Además, el ayuno intermitente puede mejorar la sensibilidad a la leptina, lo que ayuda al cuerpo a reconocer mejor las señales de saciedad y evitar comer en exceso.
5. Promueve la retención muscular
A diferencia de las dietas tradicionales de restricción calórica que suelen provocar pérdida de masa muscular junto con pérdida de grasa, el ayuno intermitente tiende a promover la retención muscular. Al mantener o incluso aumentar los niveles de la hormona del crecimiento (HGH) durante los períodos de ayuno, el ayuno intermitente puede ayudar a preservar la masa muscular magra y, al mismo tiempo, promover la pérdida de grasa. Esto hace que el ayuno intermitente sea una estrategia de pérdida de peso más sostenible para quienes desean mantener la masa muscular mientras eliminan grasa.
6. Sencillez y adherencia
Uno de los aspectos más subestimados del impacto del ayuno intermitente en la pérdida de peso es su simplicidad. No hay planes de alimentación complicados, recuento de calorías ni restricciones alimentarias. Esta simplicidad a menudo conduce a una mejor adherencia a largo plazo, lo que es un factor crucial en cualquier plan de pérdida de peso exitoso. Las investigaciones muestran que las personas tienen más probabilidades de seguir el ayuno intermitente que las dietas tradicionales, lo que conduce a mejores resultados de control de peso a largo plazo.
Conclusión
El ayuno intermitente es más que una moda: es un método de pérdida de peso respaldado por la ciencia que se centra en cuándo se come en lugar de en lo que se come. Al promover la restricción calórica, mejorar la quema de grasas, estimular el metabolismo, equilibrar las hormonas y preservar la masa muscular, el ayuno intermitente proporciona una estrategia integral para una pérdida de peso eficaz. Tanto si eres principiante como si has probado varias dietas en el pasado, el ayuno intermitente ofrece una forma flexible y sostenible de alcanzar tus objetivos de pérdida de peso.
Fuentes:
- Trepanowski, JF y Bloomer, RJ (2010). El impacto del ayuno religioso en la salud humana. Nutrition Journal, 9 (1), 57.
- Fung, J. (2016). La guía completa del ayuno: sane su cuerpo mediante ayunos intermitentes, en días alternos y prolongados . Victory Belt Publishing.
- Heilbronn, LK, Smith, SR y Ravussin, E. (2003). Ayuno en días alternos en sujetos no obesos: efectos sobre el peso corporal, la composición corporal y el metabolismo energético. American Journal of Clinical Nutrition, 78 (1), 69–75.
- Antoni, R., Johnston, KL, Collins, AL y Robertson, MD (2017). Efectos del ayuno intermitente en el metabolismo de la glucosa y los lípidos. Actas de la Nutrition Society, 76 (3), 361-368.
- Gabel, K., Hoddy, KK, Haggerty, N., Song, J., Kroeger, CM, Trepanowski, JF y Varady, KA (2018). Efectos de la alimentación restringida en el tiempo durante 8 horas sobre el peso corporal y los factores de riesgo de enfermedades metabólicas en adultos obesos: un estudio piloto. Nutrición y envejecimiento saludable, 4 (4), 345-353.